Cuando echamos un vistazo a la moda de verano para embarazadas es muy fácil que veamos que los bañadores tienen la zona de la barriga cubierta, lo que puede dar a entender que tomar el sol puede ser perjudicial para la salud del bebé o de la futura mamá.
Otra de las razones del por qué están cubiertos la mayoría de bañadores es por vergüenza de la embarazada, aunque ninguna mujer debería sentir vergüenza en este momento tan importante en su vida. De hecho en un post anterior hablamos de no malgastar tu embarazo, es esa lista uno de los consejos era justamente llevar un bañador en público, enseñando tu barriga sin problemas porque dentro de ti está creciendo una personita y punto, es tu embarazo. Para leer ese post completo puedes pinchar aquí.
Lo cierto es que no hay ningún peligro en que una mujer embarazada no solamente pueda ponerse al sol sino que lo haga utilizando crema protectora, es algo normal y corriente.
Las precauciones que se deben seguir es que se debe tomar el sol de manera responsable, y tener en cuenta que no supone ninguna clase de riesgo ni para el bebé, ni para la futura mamá que se exponga la barriga al sol.
¿Existe riesgo para mi bebé si uso protector solar?
El bebé no corre ninguna clase de peligro dado que está lo suficientemente hidratado dentro del útero de la madre, por tanto, teniendo esa seguridad, las precauciones que hay que tomar son las mismas que si no se estuviera embarazada.
Lo principal para no quemarse la piel es utilizar una crema protectora de calidad, pero siempre con un mínimo de protección solar, que no debe ser inferior a 20 o 30 según los expertos, aunque esto depende sobre todo del tipo de piel, por lo que se tendrás que consultar con los expertos para te que aconsejen cuál es la más adecuada.
Si se quiere tener la completa seguridad del uso de un protector solar, además de una buena crema con un factor de protección óptimo, se pueden buscar cremas fotoprotectoras con factores de protección UVA y UVB.
Estas cremas están especialmente diseñadas para cualquier clase de persona, incluso las mujeres embarazadas, siempre una medida muy eficaz para protegerse la piel, pero insistimos, tomar el sol con moderación y de manera precavida no afectará para nada a la salud del pequeño.
Respecto a las horas de sol más recomendables son las primeras y últimas horas del día, procurando evitar las horas centrales dado que es cuando el sol es más intenso y podríamos sufrir quemaduras si no nos protegemos correctamente.
Es importante hidratarse, tanto por dentro como por fuera, por lo que habrá que llevar siempre una botella de agua o incluso darse un pequeño chapuzón, sea en la playa o en la piscina.
Esperamos os vaya muy bien este verano, si estáis embarazada, chicas a disfrutar del sol y estos maravillosos meses. Un abrazo y nos vemos en el próximo post.