Hoy os hablaré de la Gastroenteritis, dicho término es muy utilizado por el personal médico para englobar una serie de síntomas como: náuseas, vomito, dolor abdominal y diarrea. Dicha enfermedad generalmente es transitoria y un gran porcentaje es debida a una infección viral, bacteriana ó parasitaria.
Cuando observamos que el bebé o niño tiene deposiciones blandas y más veces de las que normalmente come, probablemente estamos ante una diarrea, así mismo en los niños mayores, sí observamos una mayor frecuencia en las deposiciones y son de consistencia liquida, igualmente estamos ante este síntoma llamado diarrea. La diarrea infantil, puede tener muchas causas, como mencione anteriormente; una causa infecciosa (virus, bacterias, parasitos), una causa alimentaria ó inclusive una causa medicamentosa.
Así mismo dentro de un cuadro clínico de gastroenteritis, nuestro niños pueden presentar la diarrea acompañada con náuseas, vomito, dolor abdominal y en ocasiones fiebre. Por lo que es aconsejable, siempre estar atentos ante el peligro de una deshidratación (cuando el niño pierde mas líquido del que ingiere) y si hay fiebre, de la misma.
La diarrea de origen infeccioso, suele durar de aproximadamente 5 días y en el caso de que sea viral, no es necesario ningún antibiótico, cuando se trata de un origen bacteriano o parasitario, generalmente posterior a un cultivo de las heces, el pediatra o médico tratante recomendará la toma de un antibiótico adecuado para la misma.
La otras causas no infecciosas para la inflamación del tracto gastrointestinal (gastroenteritis), podrán ser la ingesta de alimentos como la lactosa (en aquellos que poseen intolerancia de la misma) y el gluten (en aquellos que padecen la llamada celiaquía). Igualmente pueden existir, intoxicaciones alimentarias asociadas con los síntomas que os he mencionado anteriormente.
Entonces, ante un cuadro de gastroenteritis, es importante cuidar la hidratación de nuestros niños, es decir por cada deposición blanda ó liquida debemos intentar darle de ingerir liquido, NO debemos obligar al niño a ingerir grandes cantidades de liquido, ya que podemos ocasionar nausea o más vomito si los presentan, es mas importante la calidad de la ingesta que la cantidad del líquido que le ofrezcamos. Igualmente, si presenta fiebre, controlarla con los medicamentos y dar una dieta/alimentación adecuada.
Quiero terminar recomendándoles, que lo importante es tener calma y paciencia ante un cuadro de diarrea y si observamos que los síntomas no se controlan y aumentan, debemos ir al médico para ser diagnosticados y tratados debidamente. Eso si, no le exijamos al médico que recete antibióticos si dice que no son necesarios, ya que el tomar un tratamiento inadecuado puede demorar o empeorar la mejoría del niño y hagamos caso a nuestro médico en las recomendaciones de alimentación y cuidados que debemos seguir.
Dr. CJ Téllez-Castillo
“Sentido común: algo así como salud contagiosa”. Alberto Moravia, escritor y periodista italiano
