Así como tenemos prendas “clave” que forman parte de nuestro fondo de armario, de igual forma es importante contar con complementos que sean atemporales y que podamos utilizar durante todo el año.
Es el caso de los zapatos. Tenemos la impresión que si es invierno, solo zapato cerrado, si es verano, solo sandalias. Pero la verdad es que no hay una regla, sobre todo en estos tiempos donde el estilo depende más de la personalidad y la actitud de quien lo lleve, que de los dictados de las tendencias; aunque se sigan de cerca.
Entonces, los zapatos que debes tener en tu fondo de armario serían los siguientes:
Espardeñas. Este tipo de calzado es el “must have” de cada verano. Las grandes marcas la han elevado al olympo de prenda imprescindible para la temporada estival, con diseños y estilos que permiten que las uses más allá del chiringuito de la playa. Tal y como se están elaborando hoy día, las espardeñas puedes llevarlas desde la primavera hasta el final del verano; incluso en climas más templados, iniciando el otoño. Es el zapato perfecto para estilismos vaporosos y cómodos. Ya no solo las puedes encontrar en colores muy “de verano”, y las consabidas rayas; sino también en colores mucho más sobrio e incluso con toques metalizados que les dan un aire muy sofisticado.
Sandalias. Las sandalias “son para el verano” aunque cada vez vemos más estilismos con sandalias en pleno invierno. Las sandalias como fondo de armario no son para otra época que no sea en la que puedas lucir con libertad y tranquilidad tus pies. En este caso, la opción de sandalia como fondo de armario es la típica en color camel o azul marino para que puedas combinarla con todo (o casi todo); sin olvidar que un par de sandalias en color negro, con un diseño minimalista, sin muchos adornos es ideal porque podrás usarla de temporada en temporada. Planas o de tacón, pon un par de sandalias en tu fondo de armario.
Zapatos destalonados. Son el punto intermedio entre una sandalia y un salón. En colores neutros son ideales porque podrás usarlos cuando el calor apriete o en aquellos días en los que el clima es más amable. Inclínate por aquellos que tengan un tacón más bien clásico, de esa forma podrás combinarlos tanto con pantalones como con vestidos.
Peeptoes. Son un clásico y llegaron para quedarse. El típico es negro, con un poco de plataforma delante y tacón más bien fino. Lo podrás usar con faldas, pantalones, para la oficina o para una cita más formal y te vendrán de fábula en cualquier época del año.
Salón. Es el rey de cualquier armario. Un salón negro, otro en color camel o beige no deben faltar en tu lista de imprescindibles para cada temporada. En verano podrá usarlos incuso con tu minifalda preferida y en invierno con prendas más abrigadas.
Bailarinas. Cómodas y cada vez con diseños más elegantes. Han dejado de ser las “informales” del armario para convertirse, incluso en protagonistas de cualquier estilismo. Lo ideal es tener varios pares en colores neutros y alguna con print o un detalle que la diferencia. De esta forma podrás darle a tu looks, dependiendo de la temporada, un toque más divertido o más formal.
La bailarinas van bien con todo, desde vestidos vaporosos, hasta trajes de chaqueta. No deben faltar en tu fondo de armario de zapatos.
Al final no es necesario gastar un fortuna en zapatos. Ten los que indispensables para conformar un fondo de armario equilibrado y que puedas aprovechar para darle a tu look ese complemento que lo lleve a otro nivel. Recuerda, menos es más.
¿Cuál es el zapato que más se repite en tu armario? ¿Has conformado tu fondo de armario de zapatos?
Nos leemos en el próximo post.
Fotos: Castañer/StyleFashionist/Keywordsuggest/Trendyoutlook /Glamour/Trendencias/Lauren Messiah
