Durante el verano tendemos a salir de nuestros hábitos regulares, cambiamos nuestra rutina y tendemos a los excesos. Sin embargo, siguiendo unas pocas pautas fáciles y nada complicadas, podemos lograr mantenernos y seguir cuidando nuestro cuerpo en verano.
Todo comienza con la nutrición y lo que comes. Revisa tus porciones. El primer paso es comer sano y de forma balanceada
Hacer ejercicio de forma continuada. Está claro que en ocasiones, de vacaciones no vas al gimnasio si tienes costumbre de hacerlo de forma habitual en tu día a día. Pero caminar, hacer estiramientos y deporte al aire libre compensa las horas que no haces tus ejercicios cotidianos. Patinar, nadar, dar largos paseos, alquilar bicicletas, son actividades que también puedes hacer durante tus vacaciones verano.
Tomar infusiones frescas y desintoxicantes ayudan también al cuerpo a mantenerse.
Estando con tus hijos también puedes quemar muchas calorías. No solo porque vayas detrás de ellos, sino organizando juegos con ellos. ¿Te has plateado saltar la cuerda o participar juntos en gimcanas?
Aprovecha, si estas de vacaciones en algún hotel y tiene gimnasio o spa de beneficiarte de ese servicio. No solo mantienes tu cuerpo en forma, sino que también le ayudas a relajarse y a mantener el nivel de energía necesario para todas las vacaciones.
En general los expertos recomiendan para mantener tu cuerpo en verano, pasarse al verde, moverse, hidratarse y sobre todo, divertirse. ¡Las endorfinas son maravillosas para la salud!
Y tu, ¿cómo cuidas tu cuerpo durante las vacaciones?
Hasta el próximo post